Enseña a tus hijos a ordenar. Un proyecto para el verano

Llegaron las vacaciones y en este año queremos disfrutarlas. ¡Te apoyo! 

Para que tus hijos no pierdan algunas rutinas y sabiendo que como padres queremos que nuestros hijos sean habilidosos en muchas tareas, quiero motivarte a aprovechar este tiempo y enseñarles habilidades de orden. 

Ser ordenado no es cuestión de temperamento ni de personalidad, ni tampoco es cuestión de edad. Desde pequeños pueden aprender a ser ordenados. Es cuestión de hacer del orden un hábito 

Cuando mis hijos eran pequeños, cada verano hacía una dinámica con ellos, tenían una tarea asignada para realizar cada día a la misma hora. Por ejemplo, guardar su ropa, hacer su cama o hacer la lista del super. Cada tarea se ha incorporado a su día a día. 

Los beneficios de una casa ordenada se reflejan en todos los miembros de la familia. Aprenden a tener roles en el hogar.

- Que sean más independiente y se adapten a las normas sociales

-  Que disfruten el proceso de adquirir nuevos hábitos

- Que trabajen en equipo y experimenten la cooperación y el respeto.

- Que desarrollen habilidades motoras, se sientan capaces y desarrollen la autoestima

- Que adquieran confianza para descubrir nuevas habilidades

- Enseñarles desde que comienzan a caminar. 

- Ir de a poco. Llevarlos a su ritmo y considerando sus destrezas de modo que ellos mismos terminen haciendo sus tareas.

- Paciencia. El orden exige un mínimo de flexibilidad. No podemos pretender que un niño de 4 años adquiera una destreza en una semana. 

Unos recursos que me han funcionado:

- Establecer horarios

- Dar ejemplo

- Juegos / canciones divertidas

- Explicar las consecuencias del desorden

- Relación del orden con la independencia

Elabora una guía para lograr los objetivos. A mi familia le ha funcionado este método, espero que a la tuya le funcione.